jueves, 31 de marzo de 2011

PADRE FIDEL OÑORO: LETCIO DIVINA MES DE ABRIL

Cuaresma y Pascua

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4° Domingo de Cuaresma - Juan 8,1-41

5° Domingo de Cuaresma - Juan 11, 1-45

Domingo de Pascua - Juan 20,1-9

JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD: CONOCE MÁS SOBRE LA PRÓXIMA JMJ 2011

Madrid, 28 de marzo de 2011.- Muchos son los que os gustaría conocer el día a día en la sede de la Jornada Mundial… De una manera divertida esto es lo que pretende este lipdub, realizado por la web EmPapate, un portal no oficial hecha por jóvenes y para jóvenes que desde hace algunos meses apoya la difusión de la JMJ.

Un lipdub es un vídeo musical realizado por un grupo de personas que sincronizan sus labios, gestos y movimientos con una canción popular. Se suele realizar en una sola toma (plano secuencia), para enseñar las instalaciones y día a día de universidades, empresas… siempre en un tono divertido, informal y creativo. “La idea del lipdub en la sede de la JMJ se fraguó una de las tardes de domingo en las que nos reunimos para dar vida a nuestra web, ¿por qué no dar a conocer la sede donde trabajan todos los voluntarios y profesionales de la JMJ? Y lo que comenzó como un ‘por qué no’ se hizo realidad”, ha explicado Guadalupe Lillo una de las promotoras de la iniciativa.

Recrear todos los ambientes Guadalupe Lillo y María Gil Ruiz, dos de las ideadoras de la iniciativa, han contado cuáles fueron los grandes retos del rodaje. “El día de la grabación nos presentamos en la sede dispuestos a sacar la JMJ adelante. Había que coordinarlo todo, una de las cosas que más nos costó fue por ejemplo, la ambientación del pasillo que simularía la Gran Vía madrileña. Semanas antes del rodaje, un grupo de voluntarios relacionados con el arte, se dedicaron a pintar edificios para dar vida a una calle muy transitada. Otro reto fue emular la Vigilia de Cuatro Vientos en el salón de actos, que tenía que parecer una noche de agosto de 2011, tiendas de campaña, sacos de dormir, luces especiales, y cómo no un grupo de artistas exóticos y con mucha marcha…

Pero la parte más emocionante, fue cuando todos, en el patio de la sede, bailamos, cantamos, y alzamos las cartulinas (debidamente colocadas) que sugerían el logo de esta JMJ, y subiendo una pancarta de muchos metros que decía ‘Madrid 2011’ vimos cómo los globos de helio, que nos habían regalado, se perdían entre las nubes… Ha sido una experiencia única, de generosidad, de creatividad y palpar la unión que existe entre los distintos departamentos…".¡No esperes más! ¡y ve el lipdub! Galería del making-off del lipdub en la sede de la Jornada Mundial

martes, 29 de marzo de 2011

SACERDOTES MÁS PREPARADOS PARA ENFRENTAR SATANISMO Y LA MAGIA


ROMA, martes 29 de marzo 2011 (ZENIT.org).- “Resolver las dificultades debatidas desde hace tiempo por los sacerdotes, que intentan resolver los problemas planteados por las personas que por un motivo o por otro, entran en contacto con el mundo del ocultismo, la magia, satanismo, o por las que creen tener algo que ver con la acción del demonio”.


Describió de este modo, el objetivo del sexto curso “Exorcismo y Oración de Liberación”, iniciado en Roma el pasado lunes, Giuseppe Ferrari, secretario del Grupo de Investigación e Información Socio-Religiosa (GRIS), que ha organizado junto al Instituto Sacerdos del Ateneo Pontificio Regina Apostolorum, la iniciativa, apoyada por la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos y por la Congregación para el Clero.

En la lección introductoria, Ferrari advirtió que la resolución de problemas relacionados con el satanismo o la magia “puede ser aplazada u obstaculizada por la poca preparación de aquellos presbíteros que no se sienten capaces o no tienen los instrumentos necesarios para acercarse de un modo adecuado a las exigencias de las personas mencionadas”.

Para esto, es “evidente que solo la formación en profundidad de un número adecuado de sacerdotes permite afrontar con mayor eficacia y distribuidas mejor entre los distintos sacerdotes, las diversas peticiones de intervención, dirigiéndolas hacia los exorcistas, oficialmente encargados, sólo los casos que verdaderamente necesitan su intervención”.

Cuatro elementos

El experto quiso centrarse sobre todo en cuatro aspectos que pueden tener relevancia con respecto a los temas del exorcismo y del satanismo: la legalidad del exorcismo, negatividad y contradicción del ambiente satánico; eficacia de la acción a distancia de maleficios u otras acciones mágicas, comparación entre la figura del exorcista y la del mago o trabajador de lo oculto.

En cuanto al primer punto, destacó que los devotos del satanismo podrían “decir no sentir respetada la propia dignidad de persona por el ejercicio de prácticas que tienden a aplastar la entidad o la energía, como la quieran definir, a la que pretenden dirigir su culto”.

Exactamente por esto, explicó, “hay que evidenciar que el rito del exorcismo respeta plenamente la libertad y la dignidad humana”: “no impone nada a nadie y que no tiene ningún efecto si no hay adhesión de la voluntad de la persona para liberarse de lo que considera malo, es decir de la influencia o acción, sea verdadera o presunta”.

El satanismo, prosiguió Ferrari, “crea un problema social, ético y cultural de gran importancia, pues consigue aprobar una inversión completa de los valores”.

Entre las demostraciones de contradicción, “no se ve como pueda tener una justificación lógica y racional el comportamiento de una persona que incluso no creyendo ni en el demonio, ni en Dios, ni en la Iglesia, ni en el Sacrificio Eucarístico, se compromete de un modo tan fanático en las llamadas 'misas negras'”.

Acerca de los maleficios o acciones mágicas, el experto observó que las actitudes irracionales y supersticiosas “no son de quien cree en un modo racional en la existencia del más allá y en su acción en el mundo material, sino de quien está convencido de poder usar al más allá a su voluntad, y de quien llega a pensar que tiene el poder de sobrepasar las leyes naturales y someterlas a su voluntad, evidenciando implícitamente, y de este modo, una especie de delirio de omnipotencia”.

Ferrari subrayó finalmente “la profunda y sustancial diferencia existente entre el ocultista o mago y el exorcista” indicando que la clave está en “una simple pero significativa pregunta: '¿Quién os manda?'”.

“El exorcista no es sólo el que recibe un mandato explícito del obispo, sino que es, también y sobre todo, un sacerdote, es decir el que tiene el inmenso poder de consagrar el pan y el vino convirtiéndolo en Cuerpo y Sangre de Cristo”. “El mandato del presbítero es un mandato que viene directamente de Cristo a través de la Iglesia”.

Jóvenes y satanismo

El periodista y escritor Carlo Climati se centró en “el satanismo juvenil”, recordando que “el interés de los jóvenes por el mundo del satanismo ha llenado, en estos últimos años, las páginas de los periódicos”.

En este contexto, exhortó a hacerle frente a un tema tan delicado “con espíritu constructivo, sin difundir alarmismos, tratando de examinar la realidad de un fenómeno que obviamente no afecta a la mayoría de los jóvenes, pero que al mismo tiempo no debe ser ignorada”.

El satanismo, destacó, “busca derrocar y destruir los valores universales que están inscritos en el corazón de todo ser humano” y “crear confusión entre los jóvenes para construir una especie de sociedad al contrario en la que el bien se convierte en mal y el mal en bien”.

“Esta idea se representa perfectamente a través de un símbolo típico de los satanistas: la cruz invertida, que significa la inversión de los valores del Cristianismo”, observó.

El satanismo tiende, además, “a difundir entre los jóvenes un sentido de pesimismo, de rendición, de oscuridad, de desesperación”, representando “la muerte de la esperanza” y empujándoles a creer “que la vida es un especie de jungla en la que vencen sólo los más fuertes”.

Por esta razón, es necesario “ayudar a los sacerdotes, maestros, padres, educadores a hacer una obra de prevención entre los jóvenes, para que las nuevas generaciones no sean víctimas de determinadas tendencias peligrosas”.

sábado, 26 de marzo de 2011

LA VOZ DE LOS PADRES PARA EL III DOMINGO DE CURESMA (A)

San Agustín, In Ioannem tract., 15

Lo cual es verdadero, ya se trate del agua material o ya de aquella que ésta representa; porque el agua está en el pozo, y las pasiones del mundo en una profundidad oscura, de donde las sacan los hombres con la vasija de sus pasiones. Porque el que no realiza los deseos, no puede llegar a los placeres. Y cuando alguno llega hasta los placeres de esta vida, ¿no tiene sed de nuevo? Luego el que bebe de esta agua tendrá sed otra vez. Mas si recibe agua de mí, no tendrá sed eternamente. ¿Y cómo tendrán sed otra vez los que estén embriagados por la abundancia de la casa de Dios? ( Sal 35). Prometía, por lo tanto, cierto alimento y la saciedad del Espíritu Santo.

Crisóstomo, ut supra

Véase cómo aquella mujer era conducida poco a poco a la altura de los grandes misterios. Porque primeramente creyó que el Salvador era algún malvado de los judíos. Después, oyendo decir "agua viva", creyó que se trataba del agua material. Después, diciendo que se trataba de cosas espirituales, creyó, en verdad, que podía haber una agua capaz de apagar para siempre la sed. Aunque todavía no sabía qué agua sería ésta, la pedía creyendo que sería mejor que todas las aguas materiales. Por esto añade: "La mujer le dijo: Señor, dame esa agua para que no tenga sed ni venga aquí a sacarla". En este concepto le cree superior al patriarca Jacob, de quien tenía formada una opinión tan alta.

San Agustín, ut supra

O de otra manera: aún se fijaba en lo material aquella mujer. Se complacía en no tener sed y creía que era esto lo que el Señor le había ofrecido, pero en sentido material. Dios había concedido en una ocasión a su siervo Elías que no tuviese ni hambre ni sed en el espacio de cuarenta días. Y el que puede hacer esto por cuarenta días, ¿no podría darlo para siempre? ( 1Re 19). Complacida, pues, con tal obsequio, le ruega que le dé agua viva. Por esto sigue: "La mujer le dijo: Señor, dame esa agua para que no tenga sed ni venga aquí a sacarla". La pedía por evitarse el trabajo, porque, como persona débil, rehusaba el trabajar. Ojalá que hubiese oído: "Venid a mí todos los que trabajáis y estáis cargados, y yo os aliviaré" ( Mt 11,28). Y esto lo decía Jesús para que ya no trabajase; pero ella aún no lo entendía. Finalmente, quiso el Señor que le entendiese. Por esto sigue: "Jesús le dijo: Ve, llama a tu marido y ven acá". ¿Qué es esto? ¿Acaso quería darle aquella agua por medio de su trabajo? Pero ella aún no lo entendía; quería enseñarla por medio de su marido, así como dice el Apóstol, refiriéndose a las mujeres: "que si alguna quiere aprender pregunte a su marido en su casa" ( 1Cor11,35). Pero lo que allí se dice era para cuando no estuviese Jesús que enseñe. Mas como el mismo Señor era el que estaba presente, ¿qué necesidad había de hablarle por medio de su marido? ¿Acaso habló por medio de su marido a María Magdalena, que estuvo sentada junto a los pies del Salvador?

MEDJUGORJE MENSAJE DEL 25 DE MARZO 2011


“¡Queridos hijos! De manera especial hoy deseo invitarlos a la conversión. Que a partir de hoy comience una vida nueva en su corazón. Hijitos, deseo ver su “sí” y que su vida sea el vivir con alegría la voluntad de Dios en cada momento de su vida. Hoy de manera especial yo los bendigo con mi bendición maternal de paz, de amor y de unidad en mi Corazón y en el Corazón de mi Hijo Jesús. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!”

jueves, 24 de marzo de 2011

CONFERENCIA EPISCOPAL ARGENTINA: AÑO DE LA VIDA


Desde hace algunos años, ha quedado establecido en el calendario de nuestro país, el 25 de marzo, como el día del niño por-nacer. Pero desde hace muchos siglos, los cristianos celebramos en esa fecha, la fiesta de la Anunciación, recordando el momento en el que el ángel le pregunta a María si acepta ser la Madre del Señor (Lc 1,26-38). Con el “sí” de María comienza la existencia histórica de Jesucristo, quien empieza así a vivir en el vientre de esta joven mujer de Nazareth.

Desde entonces podemos decir que Dios ha tomado partido por el hombre, por su vida, asumiendo él mismo todas las vicisitudes de la existencia humana. Dios ama la vida de tal modo, que se hizo uno de los nuestros, creciendo en el vientre de una mujer, naciendo de ella, viviendo y muriendo como todos nosotros.

Desde su nacimiento la Iglesia de Cristo entiende su misión en el mundo como una celebración, un anuncio y un servicio a la Vida. A lo largo de sus dos mil años de existencia promovió una `cultura de la vida´. Lo hizo a través de las obras de ayuda a los más necesitados, la educación de niños y jóvenes, el acompañamiento a los novios y a los matrimonios, la atención brindada a los ancianos, el interés por cuidar a los enfermos y de asistir a quienes están muriendo y muchas otras iniciativas orientadas a cuidar y promover la vida.

En continuidad con las enseñanzas de Jesús, sostenemos el valor de toda vida humana, pero nos sentimos especialmente llamados a cuidar y promover la vida frágil, expuesta o en riesgo. Por eso nos preocupa especialmente una de las etapas de mayor fragilidad, la del comienzo de la vida, frente a una mentalidad que disminuye la gravedad moral y jurídica del aborto. La celebración del día del niño por nacer debe invitarnos a la reflexión y al compromiso. A la reflexión sobre el valor de la vida y a un compromiso concreto con esta primera etapa vital tan importante. Cuidar a los niños y niñas por nacer implica en primer lugar cuidar a sus madres, promoviendo embarazos saludables, velando por la alimentación y la atención sanitaria tanto de la madre como de su hijo o hija.

Finalmente y siempre tenemos la tarea de hacer de este mundo un lugar pacífico y justo, en el que todos los niños puedan disfrutar de una vida plena. Lo dice claramente el Santo Padre Benedicto XVI: “Lamentablemente, incluso después del nacimiento, la vida de los niños sigue estando expuesta al abandono, al hambre, a la miseria, a la enfermedad, a los abusos, a la violencia, a la explotación. Las múltiples violaciones de sus derechos, que se cometen en el mundo, hieren dolorosamente la conciencia de todo hombre de buena voluntad. Frente al triste panorama de las injusticias cometidas contra la vida del hombre, antes y después del nacimiento, hago mío el apremiante llamamiento del Papa Juan Pablo II a la responsabilidad de todos y de cada uno: «¡Respeta, defiende, ama y sirve a la vida, a toda vida humana! Sólo siguiendo este camino encontrarás justicia, desarrollo, libertad verdadera, paz y felicidad» (Evangelium vitae, 5).”

En el marco del Año por la vida, celebremos este año el 25 de marzo pidiendo al Espíritu Santo, Dador de Vida, la fuerza necesaria para transformar la realidad y que cada niño y niña, encuentren al nacer, cuna, alimento y sobre todo unos brazos sanos y amorosos de padres y madres que los guíen y acompañen en su crecimiento. María, madre de Jesús y madre de todos nos acompañe en el camino. Que así sea.


Comisión Ejecutiva de la Conferencia Episcopal Argentina
25 de febrero de 2011

martes, 22 de marzo de 2011

COMENTARIO DEL PADRE JOZO AL MENSAJE DEL 25 DE FEBRERO 2011


“¡Queridos hijos! La naturaleza se despierta y en los árboles se ven los primeros capullos que darán una hermosísima flor y fruto. Deseo que también ustedes, hijitos, trabajen en su conversión y que sean quienes testimonien con su propia vida, de manera que su ejemplo sea para los demás un signo y un estímulo a la conversión. Estoy con ustedes e intercedo ante mi Hijo Jesús por su conversión. ¡Gracias por haber respondido a mi llamada!”

¡Querida familia que reza! Mientras la Madre nos daba sus mensajes era como si nosotros hubiéramos estado escuchando a Su Hijo y Maestro nuestro Jesús, que solía explicarnos los más profundos misterios de la redención, los principios de nuestra fe Cristiana, usando los retratos de la naturaleza y de la vida cotidiana.El solía decir: "observen los lirios...contemplen los brotes de la higuera...miren las nubes..."

Fue a través de parábolas y representaciones que los apóstoles comprendieron el mensaje esencial. Jesús sabía cuando y como transmitir el Evangelio al hombre y como entusiasmarlo con la Buena Noticia de la salvación. La Reina de la Paz hace lo mismo. Nos conoce bien. Ella sabe que las imágenes y las parábolas nos ayudan mucho. En este mensaje Ella sencillamente nos lleva al campo, a nuestro viñedos y huertas, y nos llama a observar la naturaleza que despierta.

Reconocemos que la hibernación de los arboles ha llegado a su fin. Cada árbol está cambiando. Las ramitas de los arboles han comenzado ha tener savia, a brotar, a florecer. Todo está despertando. La savia nueva de la vida se siente en todos los árboles y pronto estarán nuevamente vestidos con nuevos brotes y nuevas hojas. Algunos arboles permanecerán sin cambio. Ellos no se van a vestir ropas nuevas ni dar nuevos frutos.

¿Cuáles son estos arboles? !Los muertos! Ya se están deteriorando y desapareciendo. Nuestra Señora no está hablando de ellos sino de los vivos que van a dar los capullos mas preciosos. Nuestra Señora nos abre los ojos y llama nuestra atención a los nuevos brotes, a las primeras hermosas flores que anuncian este proceso milagroso de la naturaleza: el crecimiento de brote a flor y a la jugosa fruta.

Como Madre, Ella también quiere comenzar nuestro proceso, nuestro crecimento de esta manera , que comencemos nuestra primavera, nuestro florecer personal y finalmente nuestra fructífera vida. Todo esto habla de nosotros, especialmente las frutas. Las frutas tienen el poder de decir a todo el mundo en cualquier momento quienes somos y Jesús también apoyaba el fruto, las obras mas que las palabras vacías que muy a menudo son el resultado de una ideología.

Por eso el Señor una vez le dijo a los profesores de Leyes: ellos dicen cosas pero no las practican y no las viven. El nos llamó a hacer y observar todo lo que nos dicen pero no de acuerdo a sus obras. Son sin fruto. El orgullo y las preocupaciones mundanas tanto como una doble vida, los ha hecho falsos e hipócritas. "Sean ustedes los que testimonian con sus vidas..." dice Nuestra Señora. Sí, esta es la única credencial del cristiano, el que con su vida diaria y en todas las situaciones confiesa su fe, vive su fe. Esto no es fácil. Muchos hoy quieren poner su fe y los frutos en la esfera de la privacidad. Muy a menudo escuchamos decir que la fe es un tema privado.

Frecuentemente nos encontramos con esos que solían leer en Misa y servían en el altar pero hoy ya no lo hacen porque dicen que ya han aprendido todo. Ellos no dan mas fruto. Enfermedades varias y mal tiempo destruyen las plantas y sus frutos. Para que den fruto hay que apreciarlos y cuidarlos.

De la misma manera, hay crisis morales, las crisis de la familia cristiana causada por los medios de propaganda que destruyen el clima de santidad cristiana. La propaganda y la opinión pública definen la vida como la persecución del placer, que niega los valores cristianos de la educación, la vida y la fe como regalos.Un viñedo o una huerta que no dan frutos son reconocibles desde lejos. Su falta de productividad habla fuerte a todos y a cada uno. Asimismo, la vida de un hombre es un ejemplo y un incentivo para todos.

Por eso es que San Francisco fue con el hermano León a la ciudad a predicar. Fueron a las plazas y a las calles mas transitadas. Todo sucedía en profundo silencio y humildad. El hermano, bastante perplejo, le preguntó al santo si quizás se había olvidado el sermón. San Francisco le respondió que ellos habían predicado con el ejemplo. Y esto era suficiente. Del mismo modo, Jesús nos llama a vivir de tal manera que todos puedan ver nuestras buenas obras y alabar a Dios por ellas. Por lo tanto, nuestro ejemplo es una inspiración y un incentivo para los demás.

Es especialmente importante el ejemplo de los padres, maestros y educadores, ya que observándolos y escuchándolos se forma un ideal en los corazones de los chicos que ellos deciden imitar.La Reina de la Paz nos dice que ella reza e intercede por nuestra conversión. El mundo actual, sin las poderosas conversiones a la fe cristiana y al Evangelio, arroja una sombra en la Iglesia que fracasa en mostrar el rostro de Jesús. Por lo tanto nuestra misión de vivir los mensajes, es indispensable. Es muy importante que haya esos que con su vida demuestren el poder y la grandeza de la oración, el ayuno, la santidad de la vida y la familia. Es my importante perseverar en el camino del buen ejemplo y la vida santa y en una manera colaborar activamente con la Reina de la Paz.

Volvamos con entusiasmo a nuestra exaltada misión: vivir y dar a conocer los mensajes de nuestra Madre del Cielo con el propósito de nuestra propia conversión y la conversión del todo el mundo.

Este mes vamos a rezar por:

1. Todos los miembros del grupo de oración de la Visitación, para que perseveren en el camino de conversión viviendo los mensajes de Nuestra Señora.
2. Por todos los peregrinos en este jubileo de los 30 años de las apariciones de la Reina de la Paz. Todos son llamados, y con su venida están ansiosos de responder al llamado: que puedan convertirse en un ejemplo para los demás.
3. Por todos los enfermos y discapacitados, por todos los vulnerables y aflijidos, que al encotrarse con Nuestra Señora en Medjugorje puedan encontra las gracias necesarias. Por todos los sacerdotes, confesores de Medjugorje para que los peregrinos puedan encontrar en ellos al Padre bueno y misericordioso.

lunes, 21 de marzo de 2011

P. J.A. FORTEA COMENTA LA PELÍCULA "EL RITO"

Ayer fui a ver la pelicula EL RITO. Me saque la sotana para que no pensaran en el cine que yo formaba parte de algun concurso o alguna promocion. Asimismo por no asustar a las personas de mi alrededor.Me parecio una pelicula que hara mucho bien, muy recomendable. Es verdad que no es precisa y perfecta como un documental. Tambien es cierto que los documentales suelen ser mas imprecisos que las peliculas. Pero a pesar de todo me parecio una pelicula recomendable.

El color de la cara de las personas durante los exorcismos no cambia en el modo que nos muestra la pelicula. Tan solo se congestiona la cara por el esfuerzo, pero no ocurre un cambio como en EL EXORCISTA o EL RITO.La pelicula EL EXORCISMO DE EMILY ROSE es mas exacta que esta ultima entrega.Vomitar objetos es algo que ha sucedido alguna vez, pero no es normal.

Los objetos vomitados son de muy pequegno tamagno.Que el exorcista quede poseso no es algo que haya conocido, y he conocido a muchos.El conocimiento de las cosas ocultas alguna vez puede acaecer, pero como excepcion. Las puertas no se cierran solas durante un exorcismo.

Pero a pesar de estas criticas, os puedo asegurar que la persona que tenia al lado no bajo de 100 pulsaciones/minuto durante todo el visionado.Por una de esas casualidades que tiene la vida, el exorcista Anthony Hopkings iba exactamente vestido como yo al final de pelicula. Es decir, con pantalon negro y la camisa sin solapas que llevamos bajo la sotana.La pelicula no me entusiasmo, pero desde luego era lo mejor que habia en el cine.

Mejor EL RITO que pasar hora y media a oscuras viendo tonterias de dinosaurios, marcianos con antenas en los oidos, o el tipico quinceagnero que conoce a chica, chico se enamora, problema que hay que resolver, lucha final con el Malvado de turno, y escena final en la que el orden se restaura.

José Antonio Fortea Cucurull (Barbastro, España, 1968) es sacerdote y teólogo especializado en demonología. Cursó sus estudios de Teología para el sacerdocio en la Universidad de Navarra. Se licenció en la especialidad de Historia de la Iglesia en la Facultad de Teología de Comillas. Pertenece al presbiterio de la diócesis de Alcalá de Henares (Madrid). En 1998 defendió su tesis de licenciatura "El exorcismo en la época actual" dirigida por el secretario de la Comisión para la Doctrina de la Fe de la Conferencia Episcopal Española. Actualmente está en Roma realizando su doctorado en Teología.

domingo, 20 de marzo de 2011

ENTREVISTA A CARLOS IAFIGLIOLA: DÍA DEL NIÑO POR NACER

El jueves 17 de marzo visitó el programam Camino a Roma, Carlos Iafigliola, un incansable lider pro-vida de Uruguay. El 25 de marzo, Día del niño por nacer, es un nuevo e importante desafío con el que debemos comprometernos...


jueves, 17 de marzo de 2011

DIÁCONO JORGE NOVOA: LA CURACIÓN DEL PARALÍTICO


El hecho es importante y el milagro se ha convertido en un signo de la liberación del pecado, algo mucho más importante que una limitación corporal. Jesús perdona, hace algo reservado a Dios.

lunes, 14 de marzo de 2011

DIÁCONO JORGE NOVOA: EL ÁRBOL SE CONOCE POR SUS FRUTOS


Mediante esta imagen, el Evangelio nos da hoy un criterio de discernimiento, una lección de prudencia sobrenatural. Para juzgar a un hombre, un movimiento, una doctrina, no debemos dejarnos llevar por sus apariencias o sus declaraciones. No debemos fijarnos en sus palabras, sino hemos de mirar sus obras y sus realizaciones. “Cada árbol se conoce por sus frutos”, nos recuerda Jesús.

martes, 8 de marzo de 2011

Pbro NICOLA BUX: LAS DESVIACIONES LITÚRGICAS

Roma (Italia), 8 Mar. 11 (AICA)
Pbro. Nicola Bux, teólogo y consultor de la Oficina de las Celebraciones del Papa

Pbro. Nicola Bux, teólogo y consultor de la Oficina de las Celebraciones del Papa

Un debilitamiento de la fe y la disminución del número de fieles podrían atribuirse a los abusos litúrgicos y a las misas malas, es decir, las que traicionan su sentido original y donde, en el centro, ya no está Dios sino el hombre con el bagaje de sus preguntas existenciales. Esta es la tesis que sostiene el presbítero Nicola Bux, teólogo y consultor de la Congregación para la Doctrina de la Fe y de la Oficina de las Celebraciones del Sumo Pontífice, según lo informa un despacho de la agencia internacional Zenit.

Presentando en Roma el pasado 2 de marzo, su libro “Cómo ir a misa y no perder la fe” (Come andare a Messa e non perdere la fede), el padre Bux arremete contra el giro antropológico de la liturgia.

En las páginas del volumen, especie de vademecum para la supervivencia a las misas modernas, Bux replica a quienes criticaron a Benedicto XVI, acusándolo de haber traicionado el espíritu conciliar. Al contrario –sostiene el teólogo– los documentos del Concilio Vaticano II fueron traicionados precisamente por estas personas, obispos y sacerdotes a la cabeza, que alteraron la liturgia con “deformaciones al límite de lo soportable”.


Asistir a una celebración eucarística pueda significar encontrarse ante las formas litúrgicas más extrañas, con sacerdotes que discuten de economía, política y sociología, hilvanando homilías en las que Dios desaparece. Proliferan los ensayos de antropología litúrgica hasta reducir a esta dimensión los mismos signos sacramentales “ahora llamados –es la denuncia de Bux– preferiblemente símbolos”. La cuestión no es pequeña: afrontarla supone ser tachados de anticonciliares.


Todos se sienten con el derecho de enseñar y practicar una liturgia "a su manera", tanto que hoy es posible asistir, por ejemplo, “a la afirmación de políticos católicos que, considerándose ‘adultos’, proponen ideas de Iglesia y de moral contrarias a la doctrina”.


Entre los que iniciaron este cambio, el presbítero Bux recuerda a Karl Rahner el cual, a raíz del Concilio, denunciaba la reflexión teológica entonces imperante que, en su opinión, se mostraba poco atenta u olvidadiza de la realidad del hombre.


El jesuita alemán sostenía en cambio que todo discurso sobre Dios brotaría de la pregunta que el hombre plantea sobre sí mismo. En consecuencia –esta es la síntesis– la tarea de la teología debería ser la de hablar del hombre y de su salvación, planteando las preguntas sobre sí y sobre el mundo. Un pensamiento teológico que, con triste evidencia, fue capaz de generar errores, el más clamoroso de los cuales es el modo de entender el sacramento, hoy ya no sentido como procedente de lo Alto, de Dios, sino como participación en algo que el cristiano ya posee.


“La conclusión que saca de ello Häuβling –recuerda Bux– es que el hombre en los sacramentos acabaría por participar en una acción que no corresponde realmente con su exigencia de ser salvado”, ya que prescinde de la intervención divina. A semejante tesis "sacramental", y a la derivación anexa de la liturgia, responde Joseph Ratzinger, que ya en el dorso del volumen XI "Teología de la liturgia” de su Opera omnia escribe: “En la relación con la liturgia se decide el destino de la fe y de la Iglesia”.


La liturgia es sagrada si tiene sus reglas. Pese a ello, si por un lado el ethos, o sea la vida moral, es un elemento claro para todos, por otro lado se ignora casi totalmente que existe también un “ius divinum”, un derecho de Dios a ser adorado. “El Señor es celoso de sus competencias –sostiene Bux–, y el culto es lo que le es más propio. En cambio, precisamente en el campo litúrgico, estamos frente a una desregulación”.


Subrayando, en cambio, que sin ius el culto necesariamente se vuelve idolátrico, en su libro el teólogo cita un pasaje de la "Introducción al espíritu de la liturgia" de Ratzinger, que escribe: “En apariencia, todo está en orden y presumiblemente también el ritual procede según las prescripciones. Y sin embargo es una caída en la idolatría (…), se hace descender a Dios al nivel propio reduciéndolo a categorías de visibilidad y comprensibilidad”.


Y añade: “Se trata de un culto hecho a la propia medida (…) se convierte en una fiesta que la comunidad se hace a sí misma; celebrándola, la comunidad no hace sino confirmarse a sí misma”. El resultado es irremediable: 'De la adoración de Dios se pasa a un círculo que gira en torno a sí mismo: comer, beber, divertirse'. Y en su autobiografía, Ratzinger declara: 'Estoy convencido de que la crisis eclesial en la que hoy nos encontramos depende en gran parte del derrumbe de la liturgia'”.


Para terminar, una sugerencia y una advertencia. La primera es la de relanzar la liturgia romana “mirando al futuro de la Iglesia –escribe el padre Bux–, en cuyo lugar está la cruz de Cristo, como está en el centro del altar: Él, Sumo Sacerdote al que la Iglesia dirige su mirada hoy, como ayer y siempre”.


La segunda es inequívoca: “Si creemos que el Papa heredó las llaves de Pedro –concluye–, quien no le obedece, ante todo en materia litúrgica y sacramental, no entra en el Paraíso”.+


PADRE FIDEL OÑORO: TIEMPO DE CURESMA

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viernes, 4 de marzo de 2011

MEDJUGORJE 2 DE MARZO

“Queridos hijos, mi Corazón materno sufre inmensamente mientras observo a mis hijos que obstinadamente ponen lo que es humano por encima de lo que es Divino, a mis hijos que, no obstante todo lo que los rodea y a pesar de todos los signos que les son enviados, piensan que pueden caminar sin Mi Hijo. ¡No pueden! Caminan hacia la perdición eterna.
Por eso los reúno a ustedes que están dispuestos a abrirme su corazón, que están dispuestos a ser apóstoles de mi amor, para que me ayuden, para que viviendo el amor de Dios sean un ejemplo para aquellos que no lo conocen. Que el ayuno y la oración le den fuerza en esto; y yo los bendigo con mi bendición materna en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. ¡Gracias!”

miércoles, 2 de marzo de 2011

ASESINAN MINISTRO CATÓLICO EN PAQUISTÁN

Islamabad (Pakistán), 2 Mar. 11 (AICA)
Shahbaz Bhatti, ministro paquistaní para las Minorías

Shahbaz Bhatti, ministro paquistaní para las Minorías

El ministro paquistaní para las Minorías, Shahbaz Bhatti, un confeso católico que defendió a la cristiana Asia Bibi –condenada a muerte- y que reclamaba la revisión de la ley antiblasfemia, fue asesinado hoy por un grupo de hombres armados en Islamabad, capital de Pakistán.

Según la agencia internacional Zenit, unos hombres enmascarados detuvieron su vehículo, en una calle de Islamabad, obligaron a Shahbaz Bhatti a bajar del mismo y dispararon sobre él durante dos minutos. Bhatti no llevaba escolta.

El político, de 42 años, que acababa de ser confirmado en su cargo, había sido amenazado de muerte en varias ocasiones, por haber defendido a Asia Bibi, la mujer cristiana acusada de blasfemia, y por haber pedido una revisión de las leyes antiblasfemia vigentes en el país.

El propio Bhatti, en varias intervenciones públicas, había hablado del peligro que corría y de las amenazas de que estaba siendo objeto, especialmente después del asesinato del gobernador del Punjab, Salman Taseer, por oponerse a la ley antiblasfemia.

"Sé que podría ser asesinado si continúo mi batalla, pero no tengo miedo”, había dicho públicamente.

En declaraciones a Radio Vaticano del 5 de enero, tras la muerte de Taseer, Shahbaz Bhatti aseguró que no tenía miedo a las amenazas.

“Creo que el descubrimiento de la violencia no puede crear miedo y no puede detenernos de levantar la voz en favor de la justicia y de la protección de las minorías y de las personas inocentes de Paquistán.”, afirmaba.

Expresiones de pesar y dolor por el crimen
La Santa Sede expresó hoy su preocupación por la noticia del asesinato del ministro de las Minorías.

El portavoz de la Santa Sede, padre Federico Lombardi, en declaraciones a la prensa, afirmó que “el asesinato del ministro paquistaní para las minorías” constituye “un nuevo acto de violencia de terrible gravedad”.

“Esto demuestra qué oportunas son las intervenciones del Papa a propósito de la violencia contra los cristianos y contra la libertad religiosa en general”.

“Bhatti – prosiguió el portavoz vaticano – era el primer católico en desempeñar un cargo semejante. Recordemos que había sido recibido por el Santo Padre el pasado mes de septiembre y había dado testimonio de su compromiso por la convivencia pacífica entre las comunidades religiosas de su país”.

“A la oración por la víctima, a la condena por el incalificable acto de violencia, a la cercanía a los cristianos paquistaníes tan afectados por el odio, se une el llamamiento para que todos se den cuenta de la urgencia dramática de la defensa de la libertad religiosa y de los cristianos objeto de violencia y persecución”, concluyó.

Otras reacciones
El presidente paquistaní, Asif Ali Zardari, y el primer ministro Syed Yusuf Raza Gilani condenaron el asesinato, mientras que el ministro de exteriores italiano Franco Frattini expresó personalmente y en nombre del Gobierno italiano “la más firme condena por el bárbaro atentado” que ha costado la vida a Bhatti, una persona que “se había distinguido por su visión y por su compromiso por construir una sociedad basada en el diálogo y la tolerancia hacia todas las minorías y las diversas religiones”.

Para monseñor Joseph Coutts, obispo de Faisalabad y vicepresidente de la Conferencia Episcopal paquistaní, hoy “es una jornada verdaderamente negra para los cristianos en Paquistán”, una “noticia terrible que nos pone a todos en una situación de gravísima emergencia”.

“Los cristianos no sólo están tristes, sino también enfurecidos, tendremos que hacer algo para organizarnos por nosotros mismos”, agregó, en declaraciones a la agencia italiana SIR. “Este homicidio demuestra que ni siquiera un ministro está a salvo”.

En declaraciones a la agencia Asianews, monseñor Anthony, obispo de Islamabad-Rawalpindi, que conocía a Shahbaz Bhatti desde la infancia, recordó las recientes palabras del ministro cuando confirmó su cargo, de que habría combatido “hasta la última gota de su sangre”.

“El se lo jugó todo, mantuvo una postura firme y ha pagado el precio con su sangre”, afirmó el prelado. “Lo que ha sucedido debería abrir los ojos a las minorías y al Gobierno. ¿Cuánta sangre tendrá que derramarse aún para entender que se ha colmado la medida?”.+

martes, 1 de marzo de 2011

CAMINO A ROMA POR RADIO MARÍA EN URUGUAY

El próximo jueves por Radio María Uruguay, nuevamente estará en el aire Camino a Roma. Programa que nació en 2002, y se emitió por la entonces FM Gardel (91.1) actualmente FM Futura, y a partir de 2006, e ininterrumpidamente hasta 2009, los domingos de 15 a 18 hs por Radio María en Uruguay .

Su nombre incluye dos realidades centrales de nuestra fe católica: 1) la dimensión de peregrinos que todos tenemos, el camino define muy bien nuestra existencia, de hecho a los cristianos, inicialmente se los conocía como los del camino.

Todos tenemos un camino por el que transitar para encontrar la Verdad y ponernos a su servicio. La fe católica es el camino que debemos recorrer, en actitud de conversión permanente. Jesús es: “el Camino, la Verdad y la Vida”.

El camino que recorremos está determinado por la meta, en nuestro caso, ello aparece en la expresión simbólica Roma. Vamos hacia el corazón de la fe católica. Allí está el corazón de la Iglesia, “donde está Pedro está la Iglesia”. Intentamos dar a conocer nuestra fe católica, como alimento necesario para el peregrino, como luz que irrumpe en medio de las tinieblas del mundo para ayudarnos en nuestra peregrinación. Todo lo poco que hacemos lo ponemos en las manos de María, Ella es la puerta del cielo.

Camino a Roma.
La aventura de la fe católica.
Desde el 3 de marzo
Jueves 16 a 18 hs

Equipo permanente : Diác. Jorge Novoa, María Cristina Gregorio, María Cecilia Novoa
Columnistas: Mons. Jaime Fuentes, RP Horacio Bojorge SJ, RP Fabián Barrera
Producción: Lic.Juan Pablo Novoa

BENEDICTO XVI: MENSAJE PARA LA CUARESMA 2011

Queridos hermanos y hermanas:

La Cuaresma, que nos lleva a la celebración de la Santa Pascua, es para la Iglesia un tiempo litúrgico muy valioso e importante, con vistas al cual me alegra dirigiros unas palabras específicas para que lo vivamos con el debido compromiso. La Comunidad eclesial, asidua en la oración y en la caridad operosa, mientras mira hacia el encuentro definitivo con su Esposo en la Pascua eterna, intensifica su camino de purificación en el espíritu, para obtener con más abundancia del Misterio de la redención la vida nueva en Cristo Señor (cf. Prefacio I de Cuaresma).
1. Esta misma vida ya se nos transmitió el día del Bautismo, cuando «al participar de la muerte y resurrección de Cristo» comenzó para nosotros «la aventura gozosa y entusiasmante del discípulo» (Homilía en la fiesta del Bautismo del Señor, 10 de enero de 2010). San Pablo, en sus Cartas, insiste repetidamente en la comunión singular con el Hijo de Dios que se realiza en este lavacro. El hecho de que en la mayoría de los casos el Bautismo se reciba en la infancia pone de relieve que se trata de un don de Dios: nadie merece la vida eterna con sus fuerzas. La misericordia de Dios, que borra el pecado y permite vivir en la propia existencia «los mismos sentimientos que Cristo Jesús» (Flp 2, 5) se comunica al hombre gratuitamente.
El Apóstol de los gentiles, en la Carta a los Filipenses, expresa el sentido de la transformación que tiene lugar al participar en la muerte y resurrección de Cristo, indicando su meta: que yo pueda «conocerle a él, el poder de su resurrección y la comunión en sus padecimientos hasta hacerme semejante a él en su muerte, tratando de llegar a la resurrección de entre los muertos» (Flp 3, 10-11). El Bautismo, por tanto, no es un rito del pasado sino el encuentro con Cristo que conforma toda la existencia del bautizado, le da la vida divina y lo llama a una conversión sincera, iniciada y sostenida por la Gracia, que lo lleve a alcanzar la talla adulta de Cristo.
Un nexo particular vincula al Bautismo con la Cuaresma como momento favorable para experimentar la Gracia que salva. Los Padres del Concilio Vaticano II exhortaron a todos los Pastores de la Iglesia a utilizar «con mayor abundancia los elementos bautismales propios de la liturgia cuaresmal» (Sacrosanctum Concilium, 109). En efecto, desde siempre, la Iglesia asocia la Vigilia Pascual a la celebración del Bautismo: en este Sacramento se realiza el gran misterio por el cual el hombre muere al pecado, participa de la vida nueva en Jesucristo Resucitado y recibe el mismo espíritu de Dios que resucitó a Jesús de entre los muertos (cf. Rm 8, 11). Este don gratuito debe ser reavivado en cada uno de nosotros y la Cuaresma nos ofrece un recorrido análogo al catecumenado, que para los cristianos de la Iglesia antigua, así como para los catecúmenos de hoy, es una escuela insustituible de fe y de vida cristiana: viven realmente el Bautismo como un acto decisivo para toda su existencia.
2. Para emprender seriamente el camino hacia la Pascua y prepararnos a celebrar la Resurrección del Señor —la fiesta más gozosa y solemne de todo el Año litúrgico—, ¿qué puede haber de más adecuado que dejarnos guiar por la Palabra de Dios? Por esto la Iglesia, en los textos evangélicos de los domingos de Cuaresma, nos guía a un encuentro especialmente intenso con el Señor, haciéndonos recorrer las etapas del camino de la iniciación cristiana: para los catecúmenos, en la perspectiva de recibir el Sacramento del renacimiento, y para quien está bautizado, con vistas a nuevos y decisivos pasos en el seguimiento de Cristo y en la entrega más plena a él.
El primer domingo del itinerario cuaresmal subraya nuestra condición de hombre en esta tierra. La batalla victoriosa contra las tentaciones, que da inicio a la misión de Jesús, es una invitación a tomar conciencia de la propia fragilidad para acoger la Gracia que libera del pecado e infunde nueva fuerza en Cristo, camino, verdad y vida (cf. Ordo Initiationis Christianae Adultorum, n. 25). Es una llamada decidida a recordar que la fe cristiana implica, siguiendo el ejemplo de Jesús y en unión con él, una lucha «contra los Dominadores de este mundo tenebroso» (Ef 6, 12), en el cual el diablo actúa y no se cansa, tampoco hoy, de tentar al hombre que quiere acercarse al Señor: Cristo sale victorioso, para abrir también nuestro corazón a la esperanza y guiarnos a vencer las seducciones del mal.
El Evangelio de la Transfiguración del Señor pone delante de nuestros ojos la gloria de Cristo, que anticipa la resurrección y que anuncia la divinización del hombre. La comunidad cristiana toma conciencia de que es llevada, como los Apóstoles Pedro, Santiago y Juan «aparte, a un monte alto» (Mt 17, 1), para acoger nuevamente en Cristo, como hijos en el Hijo, el don de la gracia de Dios: «Este es mi Hijo amado, en quien me complazco; escuchadle» (v. 5). Es la invitación a alejarse del ruido de la vida diaria para sumergirse en la presencia de Dios: él quiere transmitirnos, cada día, una palabra que penetra en las profundidades de nuestro espíritu, donde discierne el bien y el mal (cf. Hb 4, 12) y fortalece la voluntad de seguir al Señor.
La petición de Jesús a la samaritana: «Dame de beber» (Jn 4, 7), que se lee en la liturgia del tercer domingo, expresa la pasión de Dios por todo hombre y quiere suscitar en nuestro corazón el deseo del don del «agua que brota para vida eterna» (v. 14): es el don del Espíritu Santo, que hace de los cristianos «adoradores verdaderos» capaces de orar al Padre «en espíritu y en verdad» (v. 23). ¡Sólo esta agua puede apagar nuestra sed de bien, de verdad y de belleza! Sólo esta agua, que nos da el Hijo, irriga los desiertos del alma inquieta e insatisfecha, «hasta que descanse en Dios», según las célebres palabras de san Agustín.
El domingo del ciego de nacimiento presenta a Cristo como luz del mundo. El Evangelio nos interpela a cada uno de nosotros: «¿Tú crees en el Hijo del hombre?». «Creo, Señor» (Jn 9, 35.38), afirma con alegría el ciego de nacimiento, dando voz a todo creyente. El milagro de la curación es el signo de que Cristo, junto con la vista, quiere abrir nuestra mirada interior, para que nuestra fe sea cada vez más profunda y podamos reconocer en él a nuestro único Salvador. Él ilumina todas las oscuridades de la vida y lleva al hombre a vivir como «hijo de la luz».
Cuando, en el quinto domingo, se proclama la resurrección de Lázaro, nos encontramos frente al misterio último de nuestra existencia: «Yo soy la resurrección y la vida... ¿Crees esto?» (Jn 11, 25-26). Para la comunidad cristiana es el momento de volver a poner con sinceridad, junto con Marta, toda la esperanza en Jesús de Nazaret: «Sí, Señor, yo creo que tú eres el Cristo, el Hijo de Dios, el que iba a venir al mundo» (v. 27). La comunión con Cristo en esta vida nos prepara a cruzar la frontera de la muerte, para vivir sin fin en él. La fe en la resurrección de los muertos y la esperanza en la vida eterna abren nuestra mirada al sentido último de nuestra existencia: Dios ha creado al hombre para la resurrección y para la vida, y esta verdad da la dimensión auténtica y definitiva a la historia de los hombres, a su existencia personal y a su vida social, a la cultura, a la política, a la economía. Privado de la luz de la fe todo el universo acaba encerrado dentro de un sepulcro sin futuro, sin esperanza.
El recorrido cuaresmal encuentra su cumplimiento en el Triduo Pascual, en particular en la Gran Vigilia de la Noche Santa: al renovar las promesas bautismales, reafirmamos que Cristo es el Señor de nuestra vida, la vida que Dios nos comunicó cuando renacimos «del agua y del Espíritu Santo», y confirmamos de nuevo nuestro firme compromiso de corresponder a la acción de la Gracia para ser sus discípulos.
3. Nuestro sumergirnos en la muerte y resurrección de Cristo mediante el sacramento del Bautismo, nos impulsa cada día a liberar nuestro corazón del peso de las cosas materiales, de un vínculo egoísta con la «tierra», que nos empobrece y nos impide estar disponibles y abiertos a Dios y al prójimo. En Cristo, Dios se ha revelado como Amor (cf. 1 Jn 4, 7-10). La Cruz de Cristo, la «palabra de la Cruz» manifiesta el poder salvífico de Dios (cf. 1 Co 1, 18), que se da para levantar al hombre y traerle la salvación: amor en su forma más radical (cf. Enc. Deus caritas est, 12). Mediante las prácticas tradicionales del ayuno, la limosna y la oración, expresiones del compromiso de conversión, la Cuaresma educa a vivir de modo cada vez más radical el amor de Cristo. El ayuno, que puede tener distintas motivaciones, adquiere para el cristiano un significado profundamente religioso: haciendo más pobre nuestra mesa aprendemos a superar el egoísmo para vivir en la lógica del don y del amor; soportando la privación de alguna cosa —y no sólo de lo superfluo— aprendemos a apartar la mirada de nuestro «yo», para descubrir a Alguien a nuestro lado y reconocer a Dios en los rostros de tantos de nuestros hermanos. Para el cristiano el ayuno no tiene nada de intimista, sino que abre mayormente a Dios y a las necesidades de los hombres, y hace que el amor a Dios sea también amor al prójimo (cf. Mc 12, 31).
En nuestro camino también nos encontramos ante la tentación del tener, de la avidez de dinero, que insidia el primado de Dios en nuestra vida. El afán de poseer provoca violencia, prevaricación y muerte; por esto la Iglesia, especialmente en el tiempo cuaresmal, recuerda la práctica de la limosna, es decir, la capacidad de compartir. La idolatría de los bienes, en cambio, no sólo aleja del otro, sino que despoja al hombre, lo hace infeliz, lo engaña, lo defrauda sin realizar lo que promete, porque sitúa las cosas materiales en el lugar de Dios, única fuente de la vida. ¿Cómo comprender la bondad paterna de Dios si el corazón está lleno de uno mismo y de los propios proyectos, con los cuales nos hacemos ilusiones de que podemos asegurar el futuro? La tentación es pensar, como el rico de la parábola: «Alma, tienes muchos bienes en reserva para muchos años... Pero Dios le dijo: “¡Necio! Esta misma noche te reclamarán el alma”» (Lc 12, 19-20). La práctica de la limosna nos recuerda el primado de Dios y la atención hacia los demás, para redescubrir a nuestro Padre bueno y recibir su misericordia.
En todo el período cuaresmal, la Iglesia nos ofrece con particular abundancia la Palabra de Dios. Meditándola e interiorizándola para vivirla diariamente, aprendemos una forma preciosa e insustituible de oración, porque la escucha atenta de Dios, que sigue hablando a nuestro corazón, alimenta el camino de fe que iniciamos en el día del Bautismo. La oración nos permite también adquirir una nueva concepción del tiempo: de hecho, sin la perspectiva de la eternidad y de la trascendencia, simplemente marca nuestros pasos hacia un horizonte que no tiene futuro. En la oración encontramos, en cambio, tiempo para Dios, para conocer que «sus palabras no pasarán» (cf. Mc 13, 31), para entrar en la íntima comunión con él que «nadie podrá quitarnos» (cf. Jn 16, 22) y que nos abre a la esperanza que no falla, a la vida eterna.
En síntesis, el itinerario cuaresmal, en el cual se nos invita a contemplar el Misterio de la cruz, es «hacerme semejante a él en su muerte» (Flp 3, 10), para llevar a cabo una conversión profunda de nuestra vida: dejarnos transformar por la acción del Espíritu Santo, como san Pablo en el camino de Damasco; orientar con decisión nuestra existencia según la voluntad de Dios; liberarnos de nuestro egoísmo, superando el instinto de dominio sobre los demás y abriéndonos a la caridad de Cristo. El período cuaresmal es el momento favorable para reconocer nuestra debilidad, acoger, con una sincera revisión de vida, la Gracia renovadora del Sacramento de la Penitencia y caminar con decisión hacia Cristo.
Queridos hermanos y hermanas, mediante el encuentro personal con nuestro Redentor y mediante el ayuno, la limosna y la oración, el camino de conversión hacia la Pascua nos lleva a redescubrir nuestro Bautismo. Renovemos en esta Cuaresma la acogida de la Gracia que Dios nos dio en ese momento, para que ilumine y guíe todas nuestras acciones. Lo que el Sacramento significa y realiza estamos llamados a vivirlo cada día siguiendo a Cristo de modo cada vez más generoso y auténtico. Encomendamos nuestro itinerario a la Virgen María, que engendró al Verbo de Dios en la fe y en la carne, para sumergirnos como ella en la muerte y resurrección de su Hijo Jesús y obtener la vida eterna.

Vaticano, 4 de noviembre de 2010

BENEDICTUS PP. XVI